Erras cuando te detenes a buscar en el otro lo que no te das. Erras cuando reclamás cariño porque no lo tenés dentro. Erras cuando te sentís mal porque no te eligen.
Las carencias se sanan dentro, nunca podemos pretender saciarlas con vínculos. El estar pendiente del afuera te quita tiempo de construir algo dentro tuyo. El estar pensando de más sobre una misma situación te saca tiempo de generar consciencia emocional.
“Lo que niegas te somete” y lo que tapas en algún momento explota. Sé consciente de tus carencias para poder amigarte con ellas, tené presente tus debilidades para no proyectarlas en los demás, empezá por vos mismo para crear inteligencia emocional y que tus vínculos sean más sanos. No pretendas que el otro actúe de la manera en que vos querés. El otro tiene maneras de amar diferentes, maneras de relacionarse diferentes, maneras que no vienen a complacerte. Quien sabe qué deseas y qué te hace bien sos vos mismo. Dátelo. Regalátelo. Y después contame si seguís sufriendo por lo que no te dan.

Entradas populares de este blog