Te quería. De verdad lo hacía, cada mañana, cada momento, cada sol. Te lloré miles de ríos, supe entenderte miles de veces. Caí en un abismo al perderte, al sentirte ajeno, al añorarte. No pude abrir los ojos, en el momento no quería hacerlo. No lo concebía, de verdad no podía. Tus palabras pasaron como una leve brisa en frente a mis ojos, pude sentir, amar, soñar, creer, confiar, caminar, respetar, avanzar y retroceder. Con vos creía que todo lo podía. Me había entregado, como nunca antes jamás. Me convenciste, quizá fue eso. Creí todas tus palabras y elegí el camino de seguirte, porque quiera o no me hacía feliz. Con vos me sentía en las nubes, podía llegar a no ser violenta, podía omitir todos mis problemas, aunque sea por largos ratos. De verdad no quería que nada malo pasase, porque con vos todo era brillante. Nadie más te podía reemplazar, porque eras un sol para mí. Alumbrabas cada segundo, cada minuto... cada momento. Mi sonrisa crecía más y más y no podía hablar de tristeza si con vos estaba.
Pero no todo es color rosa, no en mi vida, no conmigo. Nací para sufrir y una vez más caí, una vez más toqué fondo. Eso me pasa por entregarme por completo, por haber podido expresar todos y cada uno de mis sentimientos, por afianzar la relación con un simple "nunca te dejaría". Cuando en verdad, hoy fue así. Irreal quisiera que fuera, pero hoy no sufro más. Decepción corre por mi cuerpo, fríos en la espalda y ya no estás. "Si te extraño no es extraño" pero con vos no quiero estar más.
El sentimiento persiste, la paz todavía está, pero las ganas se me fueron y quiero poder callar. Lejos de vos, quizá sea la mejor opción, porque me hiciste mal, muy mal.
Quizá te encuentre en otra vida, cuando el sentimiento te haya cambiado, cuando sea el amor quien transformó tus mentiras en verdades. Es que espero volver a encontrarte, más cerca pero menos distante, más mío menos ajeno. 
Y no niego haber agradecido, porque de éste tiempo yo he aprendido, que no todo puede ser perfecto y que siempre hay algo oculto bajo la manga. Mi confianza ya va desapareciendo, no con vos sino con todo el resto, te quise y hoy te quiero, pero también estoy yo, también me respeto.