Improvisadamente, te quiero. Y no pido más, no quiero perderte por nada del mundo, sentirte lejos jamás. Importancia has ganado en mi vida y no quiero que la pierdas. Si bien no expreso en palabras lo hago en hechos y mi corazón tiembla al escucharte. Es que siento algo tan extraño que tengo miedo de que sea amor, ése amor del que todos hablan: el que te hace dar vueltas, sufrir y enloquecer. No quiero vivir si es lejos de ti, si es con miedo al no tenerte, si es con suspicacia. Yo quiero "reinar en tu reino y enloquecer con vos". 
Si alguna vez te sentí distante, fue allí cuando la locura desparramó en mí el deseo de tenerte y poder añorarte. No quiero que te conviertas en recuerdo, mas nunca querré olvidarte. Apegada a vos, aferrándome, es así como me siento segura. Has llegado a ser "mi talón de Aquiles, mi poesía" y gracias, gracias por tanto. Tuviste el poder de modificar mi pasado, de borrar todo aquello que mal me hacía sentir y renovarlo. A tu lado he podido creer, he podido desparramar cada sentir y disfrutar. 
Y es que mi boca tiembla antes de pronunciar un requiebro. ¿Será miedo? La incertidumbre me invade, espero me entiendas. Pero al escucharte, al sentirte cerca, y ni hablar cuando me rozas, un frío en la espalda corroe mi ser y así me envuelvo.
Te quiero.

Entradas populares de este blog